Estamos en 1956 y Luciano Sileoni, aún muy joven, está adquiriendo experiencia en el taller de carpintería Farroni: de día hace lo que le dice el propietario; de noche trabaja para él mismo.

Uno de estos trabajos es para su madre, Giuditta, que necesita una cocina. Hay poco dinero y Luciano debe elegir los materiales más económicos, utilizando el laminado sólo para el exterior de las puertas y no para el interior. El resultado es una vista preliminar de lo que será el estilo Lube: una cocina bien estudiada, funcional y muy resistente.

Tan resistente que la señora Giuditta se decide a cambiarla sólo en 1990, casi 35 años después. 

En Italia es una época de fermento y de grandes ideas. Luciano Sileoni, joven operario carpintero, completa su sueldo armando muebles después de la cena. Un día propone a su amigo y barbero del pueblo BENITO RAPONI asociarse para fabricar muebles.

Es así como en un garaje de Treia nace el taller artesanal de cocinas que hoy es la empresa Lube. El 1 de mayo de 1967 se elige el nombre SIRA (las primeras dos letras de cada uno de los apellidos de los fundadores SILEONI y RAPONI).
Para el crecimiento es fundamental la colaboración del representante por antonomasia de la historia de Lube, MARIO GRILLI, que logra hacer salir de las fronteras del pueblo a los primeros aparadores, para dar oxígeno a la pequeña empresa.

Ya por entonces, el imperativo de Luciano era satisfacer al cliente.

La pequeña empresa crecía y los espacios ya no eran suficientes; era necesario conseguir un nuevo taller. En 1973 se inaugura la fábrica de Via Fontevannazza y la sociedad adopta el nombre de Lube (esta vez, las primeras dos letras de los nombres LUCIANO y BENITO).

El mismo año, en septiembre, entra en la empresa el cuñado de Luciano, FABIO GIULIANELLI, que acababa de conseguir su diploma superior y sería una de las figuras clave para el crecimiento futuro de la empresa. El producto es válido y los pedidos se multiplican, se organiza una red de venta adecuada y comienzan las primeras colaboraciones con representantes de toda Italia, gran parte de los cuales aún hoy están en la empresa.

Las cocinas aún no salen de las fronteras nacionales porque la producción es totalmente absorbida por la demanda interna.

La fábrica de Via Fontevannazza ya no es suficiente para las exigencias de producción.

Se consigue en Passo di Treia un área industrial donde trasladarse, y en agosto de 1993 se hace una mudanza increíble. La sociedad adopta el nombre de Cucine Lube Over y la nueva estructura se irá ampliando a lo largo de los años: cada nueva nave industrial se llenará rápidamente. En una época histórica caracterizada por la globalización, la marca Lube comienza a salir de las fronteras nacionales, y se inicia la conquista del mercado mundial, cada vez más interesado en el Made in Italy de calidad.

Lo que era un pequeño taller de provincia se convierte definitivamente en una gran empresa, aún radicada en su territorio de origen.

2003 es el año decisivo para la suerte del grupo, dirigido por cuatro socios: SILEONI y GIULIANELLI deciden dar certeza al futuro adquiriendo todo el paquete accionario.

En ese momento comienza el proceso de inserción de los hijos en la organización de la empresa, dando una clara y fuerte señal de continuidad. Lube cuenta actualmente con 150.000 m² de superficie cubierta donde trabajan 650 empleados que producen 75.000 cocinas por año para un total de 76 países. Sobre el techo de la fábrica se ha instalado un sistema fotovoltaico de más de 15.000 paneles que produce aproximadamente 6 millones de kilovatios anuales de energía limpia. Las inversiones en tecnología e informatización son las columnas portantes de cada decisión estratégica.

La calidad, el servicio y la atención al cliente siempre son las prioridades absolutas de la estrategia de marketing.